Los mercados financieros globales observan con ansiedad la reunión de la Reserva Federal de Estados Unidos, que anunciará hoy su decisión sobre las tasas de interés. Esta expectativa ha intensificado la cautela entre los inversores en criptomonedas, especialmente tras la fuerte caída del Bitcoin, que descendió de 94.232 a 93.377 dólares en Binance TR en las últimas 24 horas y experimentó un notable descenso en su volumen de negociación.
La mayoría de los analistas, apoyados en la herramienta FedWatch y los datos de empleo del viernes pasado, no esperan un recorte inmediato de tasas, aunque existía optimismo respecto a indicios de recortes a partir de junio. Sin embargo, la moderación de las previsiones ha diluido esas esperanzas tras conocerse la evolución del empleo en abril, que disipó temores de recesión.
El ambiente de profunda ambigüedad se ve agravado por la compleja situación geopolítica. Las negociaciones sobre aranceles internacionales siguen sin resultados concretos, pese a breves comentarios esperanzadores desde diversos frentes la semana pasada. El mercado lee el posible discurso de Jerome Powell, presidente de la Fed, como una advertencia de que la inflación asociada a nuevas tarifas hace improbable una baja de tipos a corto plazo, inclinándose más bien hacia una pausa para observar la evolución del entorno económico.
La incertidumbre ha favorecido subidas en el oro y caídas en las criptomonedas, reflejando la percepción de que Bitcoin aún no actúa como “oro digital” en periodos de alta volatilidad e indecisión. No se esperan grandes avances hasta que se concrete algún acuerdo comercial importante o señales firmes de distensión con China.
En este contexto, expertos anticipan que los nubarrones de incertidumbre podrían perdurar varias semanas, presionando a la baja los principales activos digitales mientras los inversores buscan activos refugio más tradicionales.