Ripple ha anunciado que la SEC planea retirar su apelación en la disputa legal que ambas mantienen, aunque el organismo regulador aún no lo ha confirmado oficialmente. Según Ripple, este movimiento representa un posible punto de inflexión tanto para su empresa como para la industria de los activos digitales, ya que podría favorecer la claridad regulatoria sobre la clasificación y regulación de las criptomonedas.
Como parte del proceso, Ripple indica que la sanción propuesta se ha reducido de 125 millones a 50 millones de dólares, a la espera de aprobación formal. El director legal de Ripple, Stuart Alderoty, declaró que el caso está "prácticamente cerrado, pendiente de formalismos", aunque advierte que el visto bueno definitivo de la comisión de la SEC aún no ha sido otorgado. La falta de confirmación pública por parte de la SEC genera cierto escepticismo en la comunidad y mantiene la expectativa respecto a la conclusión definitiva del procedimiento judicial.
Esta situación tiene importantes ramificaciones para el sector cripto, pues la resolución del caso podría desencadenar un aumento en el interés institucional hacia XRP y estimular ajustes en los volúmenes de negociación. El ambiente general se mantiene cautelosamente optimista, con actores del mercado atentos a cualquier avance que aporte certidumbre regulatoria. Históricamente, resultados favorables en litigios relevantes han propiciado repuntes de precio, aunque el efecto real en XRP dependerá de la confirmación final por parte de la SEC.