Trump Coin (TRUMP) ha experimentado un fuerte repunte en las últimas 24 horas, registrando un alza de entre el 16% y el 27%, impulsada por el positivo recibimiento del reciente acuerdo comercial entre Estados Unidos y el Reino Unido. El precio superó los $14, alcanzando volúmenes de negociación diarios superiores a $1.500 millones, cifras no vistas en los últimos meses.
El rally llega tras la recuperación del mercado, ligada al fin de disputas arancelarias y a indicadores técnicos que muestran fuerte presión compradora: el RSI del token se disparó de menos de 30 a casi 80, mientras la media móvil de 30 periodos volvió a posicionarse por encima de la de 200, señal de tendencia alcista.
El entusiasmo se ve reforzado por la proximidad de un evento privado para los 220 principales tenedores de TRUMP, anunciada por el equipo vinculado a Donald Trump. El incentivo ha generado compras estratégicas, aunque persisten riesgos asociados a movimientos de grandes ‘whales’, quienes podrían realizar ventas súbitas para capitalizar beneficios, según alertas recientes de transferencias millonarias.
A mediano plazo, los analistas ven espacio para un mayor crecimiento, apoyados en la proyección de nuevos acuerdos comerciales y la implicación mediática directa de Donald Trump, que frecuentemente promueve el uso del token. Se barajan objetivos de entre $17.50 y $30 para los próximos tres meses, e incluso una meta de $100 hacia finales de año, aunque la volatilidad podría aumentar en torno a los eventos y campañas de atribución de recompensas.
También se destaca la popularidad de alternativas como Bitcoin Bull (BTCBULL), pero solo TRUMP figura como directamente impactada por la coyuntura y los principales eventos actuales.
No obstante, persisten dudas sobre la sostenibilidad del crecimiento de Trump Coin. Se señala que el 80% del suministro está en manos de entidades vinculadas a Trump, lo que genera riesgos de manipulación, y que la utilidad del activo depende primordialmente de la imagen del expresidente, su presencia en redes sociales y la especulación, más que de fundamentos técnicos propios. Además, la posibilidad de investigaciones regulatorias sigue latente, dadas las críticas públicas sobre posibles conflictos de interés y la alta concentración de capital.
La reacción positiva del mercado ha contagiado otras criptomonedas, motivada en parte por los repuntes simultáneos de Bitcoin, que supera de nuevo los $100.000. Así, el entorno actual favorece a los activos de alto riesgo y fuerte narrativa mediática.